historia y cultura
La familia de bailes Swing se basa en una cultura y una manera de vivir la música que remonta sus raíces a la cultura folklórica africana, trasladada a Estados Unidos a través del tráfico de esclavos que tuvo lugar especialmente en los siglos XVIII y XIX.
Los bailes y la música negra, hoy conocidos como Blues y Jazz, surgieron en el entorno de Nueva Orleans a principios del siglo XX, en un contexto de discriminación racial que todavía hoy luchamos por eliminar.
La búsqueda de mejores condiciones de vida llevó a la población negra a emigrar al norte de Estados Unidos, hacia las grandes ciudades. Aunque los afroamericanos llevaron consigo su arte a todas las ciudades estadounidenses (Kansas City, Chicago...), el punto más efervescente fue el barrio de Harlem, en Nueva York. Allí proliferaron los salones de baile en los años 20 y 30, y la gente acudía a bailar y a disfrutar de la música. De estos salones de baile, el más famoso fue el Savoy Ballroom.
En el Savoy había música en directo todas las noches, se hacían batallas de bandas y los mejores bailarines inventaban nuevos pasos para destacar e impresionar a la audiencia. Allí destacó un grupo de bailarines conocido como los Whitey's Lindy Hoppers. De ellos quedan testimonios audiovisuales en el cine que continúan dejándonos boquiabiertos. Algunos ejemplos son los soundies (cortometrajes realizados para acompañar una canción, algo parecido a un videoclip moderno), como por ejemplo "Hot Chocolate" o "Cottontail" (1941) y "Blip Blip" (1942). Y por supuesto las películas "A Day At The Races" (1937), "Radio City Revels" (1938), y especialmente "Helzapoppin' " (1941).
El estilo de baile que surgió en Nueva York al ritmo del Swing se denominó Lindy Hop. Le pusieron ese nombre en la fiesta de homenaje al primer vuelo sobre el Atlántico, en 1927, efectuado por Charles Lindberg, apodado "Lindy". Este vuelo sería llamado el ''salto de Lindy'', en inglés, the Lindy Hop.
El Lindy Hop se popularizó tanto que traspasó las fronteras de Nueva York y se expandió por todo el país. A ello contribuyó mucho su presencia en el cine. En California surgió la variante conocida como Smooth Lindy. Surgieron más estilos de baile swing como el Collegiate Shag, el Saint Louis Shag (propio de la ciudad de San Luis) o el Balboa (desarrollado en la península de Balboa, California). Todos se bailaban con música Jazz Swing. Esta forma de arte negra afroamericana acabó siendo gradualmente adoptada también por los blancos.
La era dorada del Swing fue decayendo debido a las profundas transformaciones sociales y económicas que conllevó la II Guerra Mundial. El mercado musical cambió, y la moda del Jazz dio paso a la del Rock'n'Roll, el Rhythm and Blues y el Boogie Woogie. El Lindy Hop fue quedando en un segundo plano ante la aparición de otros estilos de baile como el Boogie Woogie, el Rock'n'Roll y el Jive.
Sin embargo, en los años 80 y 90, resurgió el interés por el Lindy Hop y por los bailes de la era del Swing. Comenzó la época del "Revival" (Renacimiento). Algunos estudiosos de los bailes Swing se afanaros en localizar a los pocos bailarines del Savoy que aún vivían, y les convencieron para que les transmitiesen su conocimiento de estos bailes y su cultura. Las figuras más importantes en esta transmisión cultural y artística fueron Frankie Manning, Al Minns, Norma Miller y Dawn Hampton, entre otros. Gracias a ellas nos podemos hacer una idea más fidedigna de la verdadera estética y cultura Swing.
Este renovado interés se produjo simultáneamente en cuatro lugares: Suecia, Los Ángeles, Nueva York y Londres. De ahí se expandió por los países de todo el mundo: China, Taiwán, Corea del Sur, los países europeos, Latinoamérica, Mozambique, Sudáfrica, Australia...
Gracias al esfuerzo de quienes avivaron esa chispa de interés, y al avance de la tecnología y las comunicaciones, hicieron posible que hoy disfrutemos de esta maravillosa cultura afroamericana, haciéndola crecer en popularidad y siempre manteniéndonos fieles a sus raíces de origen afroamericano.
Te recomendamos estas lecturas para saber más:
-"La Reina del Swing: Las memorias de Norma Miller" (Norma Miller y Evette Jensen (ediciones Carena).
-"Historia del Jazz" (Ted Gioia) (Turner Libros).
-"Frankie Manning: The Ambassador of Lindy Hop" (Frankie Manning y Cynthia R. Millman) (Temple University Press)
-"Swing Dancing" (Tamara Stevens) (Greenwood)